Este próximo domingo se entregan en Los Angeles los premios Oscars de la Academia de Hollywood en una ceremonia que llega ya a su 87 edición y que será conducida por primera vez por el actor Neil Patrick Harris.
Sin claros favoritos en la mayoría de las categorías y pocas celebrities de renombre entre los nominados que aseguren un espectáculo televisivo actractivo, la gala de este año esconde muchas incógnitas que ni siquiera la maratón de galardones de estos meses ha conseguido despejar.
Pero si en el apartado de posibles vencedores la cosa no está clara, tampoco lo es intuir cómo se desarrollará el show: ¿brillará como host el actor de ‘Cómo conocí a vuestra madre’ o se quedará a medio camino de lo que suele hacer en los Tony o los Emmy? ¿las actuaciones musicales serán soporíferas? ¿valdrá la pena trasnochar para saber, en riguroso directo, qué película se alza con la estatuilla dorada? Si os estáis haciendo esas u otras preguntas similares, hoy os ayudamos a eliminar las dudas con unos cuantos datos, tirando de alfabeto, sobre qué esperar de la próxima ceremonia de los Oscars y no caer en lamentaciones llegado el momento.
Actuaciones musicales: no habrá tiempo para cabezaditas ni pestañeos. Tegan y Sara, Rita Ora, Adam Levine, Lady Gaga y John Legend estarán in da house y ya han confirmado su actuación. Everything is Awesome!
Británicos: ¡invasión inglesa! El clan de los de ‘La Teoría del todo’ y el de los de ‘The Imitation Game’ ocuparán buena parte de la platea. Menos acompañada pero menos perdida, Rosamund Pike también tendrá su butaquita reservada.
Chulaz@s: este apartado lo salvan (thanks, God!) Bradley Cooper, Benedict Cumberbatch, Channing Tatum, Chris Evans, Jared Leto, Scarlett Johansson, JLo y Marion Cotillard (Dieu merci!).
Directores: Richard Linklater y Alejandro González-Iñárritu mantienen el pulso en este apartado
Entretenimiento: la combinación entre las actuaciones musicales y la fe depositada en el presentador podrían ser el cóctel perfecto para asegurar la diversión.
Fanatismo: componente indispensable para seguir la gala con intensidad, deberá correr a cargo de cada espectador.
Glamour: no será el protagonista de la noche por la ausencia de figuras hollywoodienses de primera línea
Heidi Klum: la modelo y presentadora alemana no se pierde un sarao y tampoco este evento. Su presencia no tiene ninguna relevancia y nos da bastante igual, pero es un clásico intrínseco a esta cita anual.
In memoriam: en el momento más emotivo de la noche, se rendirá homenaje a los fallecidos durante el año pasado, entre los que se encuentran Robin Williams, Lauren Bacall o Bob Hoskins.
Julianne Moore: si hay un Oscar seguro, ese es el suyo
Kit de regalo: los nominados y presentadores recibirán una bolsa de regalo valorada en 125.000 dólares y que contiene, entre otras cosas, sales de mar francesas, un vaporizador, la visita a una vidente o un vibrador. ¡Habrá que fijarse bien en sus caras para saber si ya han estrenado algo!
Leticia Dolera: aliciente extra para los espectadores españoles. La actriz conducirá el programa especial de Canal +
Meryl Streep: defiende su 19 nominación y como dijo el personaje de Penélope Cruz en ‘Volver’ «¡aquí huele a pedo!».
Neil Patrick Harris: se estrena como presentador en los Oscars. Su sello personal como maestro de ceremonias son los números musicales. ¿Nos regalará alguno el domingo? Si hacemos caso a su cuenta de Twitter, todo parece indicar que sí.
http://youtu.be/danBaPWT09A
Olvidados: no veremos a Jennifer Aniston, Jake Gyllenhaal o David Fincher
Pelirrojos: si Julianne Moore y Eddie Redmayne ganan en sus categorías, el color pelirrojo y los caobas podrían convertirse en tendencia en las peluquerías
maQuillaje: tras el caso Uma Thurman, el maquillaje será un nuevo elemento que tendremos que tener en cuenta antes de escribir tuits envenenados hacia las actrices y sus cirujanos plásticos.
Relatos Salvajes: la representante argentina a la mejor película de habla no inglesa cuenta con producción española, así que sentiremos su triunfo como algo un poco español en caso de que consiga imponerse a sus rivales.
Sorpresas: que no sepamos por dónde van a ir los tiros abre el camino a los chascos y las alegrías imprevistas.
Twitter: la gala no solo se vivirá por televisión. Para enterarnos de todo, las cuentas de Twitter de la Academia y de los actores nominados e invitados serán indispensables de seguir.
El Gran Hotel BUdapest: en los Globos de Oro se proclamó Mejor Película en la categoría de comedia. ¿Y si el film de Wes Anderson pega la campanada en los Oscars y repite triunfo?
Vestidos: gracias al pre-show de la ABC podremos ver con todo lujo de detalles los atuendos de las celebs y elaborar nuestras propias listas de los mejor y peor vestidos.
Witherspoon: la ‘rubia muy legal’ tiene pocas probabilidades de darle un nuevo hermanito al Oscar que ya tiene en casa, pero merece una mención especial porque,… ¿acaso no es una debilidad?
BotoX: la alfombra roja será un buen medidor para comprobar cómo avanzan las capacidades de expresión facial de nuestros actores y actrices.
Eddie RedmaYne: el pecoso londinense podría dejar sentado a Michael Keaton y llevarse el galardón a casa. Nos parecerá bien siempre y cuando no vuelva a hablarnos de su boda y de su inexistente luna de miel en su speech.
ZzzZZzz: el sueño será el protagonista secundario y principal rival a batir durante la madrugada. ¡Una cafetera bien cargada siempre será buena ayuda!